Cuando empecé a entrar en la adolescencia mis padres me dieron una llave de casa "porque ya era mayor", pero a cambio tenia que hacer las tareas del hogar de adulto: planchar, cocinar... (antes no las hacia porque esas tareas eran más duras y peligrosas) le dije a mi madre que eso era superpesado y ella me dijo "hay que estar a las duras y a las maduras", aprendí ese refrán a una tierna edad, y creo que mandaré a mi madre a casa de Gerardo.
1 comentario:
http://espana-deactualidad.blogspot.com/
Publicar un comentario